Incremento en la abundancia de ballenas grises por segundo año en Laguna San Ignacio
El programa de investigación de campo en la temporada invernal del 2012 documentó un segundo invierno consecutivo de incremento en el numero de ballenas grises que utilizaron Laguna San Ignacio comparado con la abundancia que tuvieron para los años 2007-2010. Fue de especial interés observar que los números de las parejas madre-cría alcanzaron su número mas alto al final de la temporada en Abril, lo que sugiere que las hembras de ballena gris con crías estuvieron entrando a Laguna San Ignacio procedentes de otras áreas de crianza. En general estas ballenas parecen estar sanas, con algunos avistamientos de ballenas flacas.
El equipo de investigación de ballena gris de la temporada 2012 estuvo conformado por Sergio Martínez A., Diana López A., Tabata Olavarrieta G., Laura Rodríguez J., y Mauricio Rodríguez. En febrero se reunió con ellos el Co-director del LSIESP el Dr. Steven Swartz y fueron asistidos por Susana Tobar H., Flor Vázquez, Claudia Díaz y Erandi Calderón Y.
EL equipo empezó con los censos de ballenas grises el 18 de enero y continuó hasta el 15 de abril, cubriendo efectivamente la ocupación que las ballenas le dieron a Laguna San Ignacio durante todo el invierno, el numero total de ballenas grises que utilizaron la laguna fue mayor al observado entre 2007 y 2010. El número mayor de ballenas adultas se contó el 22 de febrero e incluyó 205 adultos solitarios y 63 pares de hembra-cría (Fig. 1).
Como se vio en el 2011, hubo un incremento en el número de pares hembra-cría al final de la temporada de invierno. Los conteos mas altos de estas ballenas fueron de 86 pares el 9 de marzo, y el segundo conteo mas alto se registro para el 7 de abril con 110 pares (Figura 2). Este incremento al final de la temporada sugiere que los pares de hembras-crías estuvieron entrando a Laguna San Ignacio provenientes de otras áreas de crianza en Baja California.
Esta agregación de hembras con sus crías originalmente se documentó durante los inviernos de 1978-1982, pero no se había visto en Laguna San Ignacio hasta el 2011. La comparación de fotografías de Bahía Magdalena y Laguna San Ignacio ayudaran a confirmar si es que existe un intercambio de ballenas grises entre estas dos áreas de agregación invernal. Los investigadores también notaron que los recién nacidos lucieron muy saludables, y muy pocas ballenas flacas se observaron en el 2012. Esto sugiere que las ballenas grises siguen recuperándose del estrés nutricional que se observó en el periodo 1998-2000.
Los conteos de ballenas solitarias alcanzaron su máximo de 205 ballenas el 22 de febrero (Fig.3). En años recientes (2007-2010) la mayoría de las ballenas grises se distribuían en las áreas cercanas a la entrada de la laguna y en la zona media de la laguna, con pocas ballenas ocupando las áreas mas interiores y mas alejadas del mar, situadas en la zona mas norteña de la laguna. Sin embargo, en 2011 y otra vez en 2012 las ballenas grises se distribuyeron a lo largo de toda la laguna, asemejándose a los patrones de distribución observados durante el periodo 1978-1982. No esta claro por que mas ballenas grises se encuentran ahora utilizando mas la Laguna San Ignacio que durante previas décadas.
La abundancia de ballenas grises y la distribución de su ocupación en Laguna San Ignacio observadas en 2011 y 2012 sugieren que las ballenas continúan utilizando esta laguna como área primaria de reproducción y crianza cada invierno. El incremento en el numero de pares madre-cría sugiere que mas ballenas hembras están utilizando Laguna San Ignacio como un área de agregación invernal que durante los inviernos del 2007-2010. También, el incremento en los conteos de parejas madre-cría esta ocurriendo a finales de marzo y principios de abril, e incluyen crías que se estima tienen entre 1 y 2 meses de nacidos. Esto sugiere que las parejas hembra-cría de otras áreas invernales de agregación (ej. Laguna Ojo de Liebre y Bahía Magdalena) se están moviendo hacia adentro de Laguna San Ignacio a finales de la temporada invernal de reproducción, un patrón observado durante los censos de los años 1977-1982, pero no durante el periodo de 1996-2010. Nuestro análisis en curso y comparación de fotografías de Bahía Magdalena y Ojo de Liebre con fotografías obtenidas en Laguna San Ignacio nos ayudarán tal vez a confirmar esta hipótesis.
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